El pianista islandés Víkingur Ólafsson regresa al ciclo Fronteras del Centro Nacional de Difusión Musical (CNDM) para deslumbrar al público con esa trilogía casi cósmica que son las tres últimas sonatas de Ludwig van Beethoven. Compuestas en un momento donde la sordera del compositor estaba ya muy avanzada, las últimas sonatas de Beethoven, op. 109, 110 y 111, constituyen un gran testimonio de uno de los genios de la música. Considerado un astro del piano, Ólafsson ya se ha enfrentado en el pasado a obras maestras de todos los tiempos. En la pasada temporada del CNDM deslumbró al público con su particular visión de las famosas Variaciones Goldberg de Bach, editado bajo el prestigioso sello Deutsche Grammophon. Gracias a su impecable técnica y su carismático estilo que conecta con nuevos públicos, se ha convertido en un pianista de culto para las jóvenes generaciones. Además de lanzar proyectos en torno a Beethoven, ha interpretado obras de Philip Glass, Claude Debussy, Jean-Philippe Rameau o Wolfgang Amadeus Mozart, así como de compositores contemporáneos como el húngaro György Kurtág.